HORROR EN LA FRONTERA"La frontera" es una de esas películas que a simple vista tenían todo lo necesario para convertirse en uno de los tantos productos que a diario, y sin ningún tipo de reparo, la industria cinematográfica americana y aledañas nos arroja a la platea como si fueran papas fritas.Sin embargo, el filme, que se encuadra dentro del cine de terror, resulta ser un producto que le escapa a todos los convencionalismos del género y se ubica como una película que se puede ver sin que la crítica final sea lapidaria.
Todo comienza con unos policías mexicanos que están buscando a Santillán (Beto Cuevas), líder y adorador del culto pagano de origen africano Palo Mayombe, y a quien se lo persigue por ser responsable de varios sacrificios humanos. Ambos policías son atrapados por los seguidores de la secta y uno de ellos es brutalmente torturado y asesinado mientras que a Ulises (Damián Alcázar) el otro policía, lo dejan mal herido pero vivo como testigo de lo que son capaz de hacer.
Pasa un año y Ed ( Brian Presley), Phil (Rider Strong) y Henry (Jake Muxworthy), deciden ir a la frontera mexicana en busca de un poco de diversión, sexo, alcohol y drogas. Lo que no saben es que sus vidas se cruzaran con la secta de Palo Mayombe y con Ulises y en vez de encontrar diversión encontraran el terror más ancestral y la muerte más violenta.
El director Zev Berman trabaja el horror desde una postura diferente, y esto sea quizá lo que coloca al filme en otra perspectiva con relación a películas similares. Solo le vasta con mostrar al comienzo, en la escena de los policías, lo terrible y asesinos que son los miembros de la secta, para que cuando Phil sea raptado por el culto con intensiones de sacrificarlo, uno comience a imaginarse todo el dolor y sufrimiento por lo que va a pasar. Berman juega con eso y uno siente un molesto nerviosismo recorriéndole todo el cuerpo, a pesar de que durante casi la mitad de la película no pasa prácticamente nada. Además, a la hora de asustar, el director prefiere hacerlo con armas legitimas, como una trama bien construida y no con los lugares comunes del género.Olvídense aquí de los sobresaltos típicos de las películas de terror.
Inspirada en hechos reales, "La frontera" es un filme inquietante y perturbador, donde el horror es tan real como lo es ese limite entre un país y otro, donde todo parece ser posible y en donde cada habitante convive a diario con la muerte sin que nadie haga algo para evitarlo.
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