
En "El origen" la mente humana vuelve a estar presente esta vez representada a tavés de los sueños, esos mundos paralelos y desconocidos que aparecen en nuestro subconsciente y que pueblan nuestra imaginación cuando dormimos.
Cobb (Di Caprio) es un personaje que se dedica a meterse dentro los sueños de las personas con el propósito de robarle información confidencial, la cual luego usa en su provecho. Cobb y su equipo enfrentan un nuevo desafío a pedido de Saito (Ken Watanabe) ingresar en la mente Robert Fisher (Cillian Murphy) hijo de un empresario muy importante a punto de morir, con la intensión de sembrar una semilla en su sub consiente (de ahí el título) para que no siga los pasos de su padre y la empresa termine con la muerte de su fundador. Pavada de idea.
A medida que el equipo liderado por Cobb se va metiendo más profundamente en el inconsiente de Fisher nuevos sueños van apareciendo y en cada uno de ellos los protagonistas deben vivir distintas situaciones al mismo tiempo pero en espacios diferentes, por eso lo de las capas de la cebolla. Nolan va construyendo el relato de modo que cada nivel en la profundidad del sueño resulta aún más complejo. Lo interesante es que nunca sabemos a ciencia cierta que es lo real y que es parte del sueño y esto es porque Nolan no hace distingos desde lo estético. Todo esta filmado con la misma luz, el mismo calor y la misma banda sonora, de esta manera el espectador cae en la trampa de no saber nunca cuando es realidad y cuando se esta dentro del mundo onírico. Como Bioy Casares en La invensión de Morel, Nolan crea su propio soñador y al terminar de ver la película uno se pregunta ¿en el sueño de quien estuve metido?
Con efectos visuales que sorprenden y un elenco más que sobresaliente "El origen" esta destinada a ser la película del año y seguramente con el tiempo se va a convertir en una película de culto, así como los hermanos Wachowsky nos metieron dentro de la "Matrix", Nolan lo hace ahora con los sueños.
Un detalle, si estuvieron atentos toda la película vean el plano del final, porque es una verdadera genialidad del director.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario