lunes, 20 de febrero de 2017

No llores, vuela de Claudia Llosa

Vuelo poético

La directora peruana Claudia Llosa conocida por el filme nominado al Oscar "La teta asustada", regresa a la dirección con "Aloft", aquí conocida como "No llores, vuela", un proyecto mucho más ambicioso, hablado completamente en inglés  y con actores internacionales.

En este nuevo filme, Llosa rebosa en poesía en cada una de sus escenas y nos adentra en una intensa trama familiar sobre Nana Kunning, una madre soltera o separada, eso no queda muy claro ni tampoco importa mucho, y sus dos hijos varones, el mayor Iván, amante de la práctica de la cetrería (uso de halcones) y el pequeño Gully, quien padece un tumor cerebral el cual no puede ser operado. 

La desesperación por salvar la vida de su hijo Gully lleva a Nana a viajar kilómetros para visitar a un sanador con cientos de seguidores llamado Newman con  el propósito de que cure a su hijo. Este encuentro, y gracias a un giro del destino en donde interviene un halcón de su hijo Iván, Nana descubrirá que posee también el don de sanar a las personas enfermas al curar milagrosamente la vista de un niño al que acoge en sus brazos circunstancialmente. A partir de allí e impulsada por Newman y por un hecho trágico en el que su hijo menor Gully muere ahogado en un lago congelado y en el que el responsable es Iván, Nana comienza su vida como sanadora, abandonandolo todo, incluso a su hijo mayor. 

Con un montaje alternado en donde pasado y presente se conjugan magistralmente, Claudia Llosa, construye un relato sorprendente, emotivo y espiritual. El filme nos lleva a reflexionar sobre las decisiones que muchas veces tomamos los adultos, equivocados o no, y  las consecuencias que estas acarrean y como la paradoja de devolverle la  vida a los otros a cambio de renunciar a la suya define su entorno y marca para siempre el camino de su hijo Iván.

Desde una puesta  casi documental, en donde la cámara persigue a sus personajes hasta unas actuaciones soberbias de Jennifer Connelly en el rol de Nana, Cillian Murphy como Iván adulto y  Mélanie Laurent como Jannia Ressmore, una periodista enferma obstinada en seguir los pasos de Nana, quien se ha vuelto misteriosa y muy selecta,  para hacerle una entrevista y ver si puede ser sanada, "No llores vuela", es una bocanada de aire puro, en donde chamanismo, cetrería y las relaciones conflictivas entre una madre y su hijo, son el principal ingrediente para disfrutar. Al  filme no le sobra nada, pero tampoco le falta y demuestra una vez más que si hay algo que Llosa sabe es llevar la poesía al cine de manera contundente.